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Los mejores pueblos mágicos de Morelos que tienes que visitar

Morelos cuenta con dos Pueblos Mágicos, Tepoztlán y Tlayacapan, ambos con encantadores atractivos turísticos y a tiro de piedra de Ciudad de México y varias capitales estatales.

1. Tepoztlán

Este encantador pueblo morelense suele recibir a muchos chilangos y cuernavacenses, ya que se encuentra a solo 83 km de la Ciudad de México, mientras que la capital estatal está a apenas 27 km.

El principal atractivo de Tepoztlán es el Cerro El Tepozteco, que cuenta con un sitio arqueológico y es escenario de una de las celebraciones más vistosas y concurridas de México.

La Montaña o Cerro de El Tepozteco forma parte de un espacio protegido de 24 mil hectáreas que incluso abarca un trozo del DF.

Los observadores de la biodiversidad que van al cerro quizá tengan la suerte de ver un lagarto moteado mexicano o lagarto enchaquirado, una especie venenosa y en riesgo de extinción.

Las construcciones del yacimiento arqueológico fueron erigidas por los Xochimilcas entre los siglos XII y XIV,  época en la que Tepoztlán llegó a ser capital de señorío.

Se trata de un conjunto adoratorio dedicado a Ometochtli Tepuztécatl, protector mexica de los borrachos o dios de la embriaguez. Quizá por eso, muchos de los asistentes a las fiestas del Tepozteco andan de lo más alegres.

La fiesta del Tepozteco es al mismo tiempo un reto, ya que los felices peregrinos se plantean el desafío de subir hasta la cumbre del cerro, donde se encuentra la pirámide que corona el conjunto adoratorio.

La fiesta se celebra el 8 de septiembre y los participantes van caminando al son de la música indígena, mientras se ejecutan danzas prehispánicas.

Tepoztlán cuenta igualmente con algunas hermosas edificaciones, llenas de historia. El ex convento de la Natividad es una obra del siglo XVI declarada Patrimonio de la Humanidad, que se distingue por su trabajo de cantería y sus imágenes religiosas, conservando algunos frescos originales.

La Iglesia de Nuestra Señora de la Natividad es uno de los templos mexicanos que cuenta con «capillas posa» que son pequeños recintos situados en el atrio, empleados para posar la imagen del Santísimo. Este elemento fue un aporte mexicano a la arquitectura cristiana.

El actual Palacio Municipal de Tepoztlán fue una remodelación del antiguo ayuntamiento colonial, realizada durante el Porfiriato, cuando también fue añadido el reloj.

Otro lugar a visitar en el Pueblo Mágico es el Museo de Arte Prehispánico Carlos Pellicer, inaugurado en 1960 en el antiguo granero del convento de la Natividad.

Pellicier fue un apasionado museógrafo tabasqueño que se dedicó totalmente a su afición tras una larga carrera como profesor, escritor, político y coleccionista de arte precolombino.

Entre las piezas exhibidas en el museo se encuentra un fragmento del dios Ometochtli Tepuztécatl que fue encontrado en el sitio arqueológico del Tepozteco.

El barrio más tradicional y activo de Tepoztlán es San Miguel. Los sanmiguelenses tienen por símbolo a la lagartija, un animal que era venerado en la época prehispánica y cuya figura encontrarás en dibujos y en puntos de venta como pieza tallada. El suvenir a llevarte de Tepoztlán bien pudiera ser una lagartija.

En Tepoztlán no puedes dejar de disfrutar de uno de sus exóticos helados, una tradición local desde que los indígenas prehispánicos mezclaban la nieve de la montaña con pulpa de frutas.

2. Tlayacapan

Tlayacapan es la tierra de los chinelos, un bonito y animado espectáculo coreográfico que es la principal atracción de los carnavales.

Igualmente, el Pueblo Mágico morelense cuenta con espléndidas obras arquitectónicas, entre las que se distinguen el antiguo Convento de San Juan Bautista, varias capillas, el templo Copto Ortodoxo y el Palacio Municipal.

La música de la famosa Banda de Tlayacapan, fundada en 1870, ha recorrido el mundo entero con un amplio repertorio de piezas.

Tlayacapan cuenta también con maravillosos parques acuáticos, en los que pasarás deliciosos ratos de esparcimiento en compañía de la familia o de amigos.

La tradición de los chinelos se originó en 1807, cuando varios jóvenes del pueblo se vistieron con ropas estrafalarias y salieron a las calles a dar brincos y contorsiones, como una burla hacia los españoles en plena Cuaresma.

El numerito se hizo costumbre y aterrizó en el carnaval con los chinelos vestidos con ropas multicolores, portando máscaras y bailando y saltando al son de la música.

La Banda de Tlayacapan emitió sus primeros compases musicales hace casi 150 años, bajo la dirección de Don  Vidal Santamaría. Cristino, hijo de Don Vidal, dirigió la banda en tiempos de la Revolución Mexicana, enfundado en su uniforme de coronel del ejército de Zapata.

Actualmente, la banda realiza frecuentes giras por el país y por el mundo, dejando en alto el talento musical de los tlayacapenses.

Entre los atractivos arquitectónicos de Tlayacapan, uno de obligatoria visita es el antiguo Convento de San Juan Bautista, un inmenso y hermoso conjunto que es Patrimonio de la Humanidad y que fue construido por los agustinos en los años 1530. Destaca por sus capillas, decoración plateresca y pinturas al fresco.

En el convento hay un pequeño museo de arte sacro y se exhiben también algunos cuerpos momificados encontrados en el transcurso de una remodelación realizada en 1980.

Las ciudades y pueblos mexicanos suelen tener muchas capillas de barrio y en Tlayacapan hay 17 de estas pequeñas edificaciones cristianas.

Las capillas que vale la pena conocer por sus bellos detalles arquitectónicos y decorativos son las de San José de los Laureles, San Agustín, San Andrés, La Exaltación, Santiago Apóstol, San Juan Bautista, Santa Anita, El Rosario, la Virgen del Tránsito y San Martín.

Siguiendo dentro del cristianismo pero pasando a su rama ortodoxa, cerca de la entrada a Tlayacapan fue inaugurado en 2007 el primer templo del culto copto en México.

La iglesia en la que son venerados Santa María y San Marcos el Evangelista, sobresale por la detallada decoración de la fachada.

El Palacio Municipal de Tlayacapan es un edificio blanco con ribetes rojos, que cuenta con seis arcos en la planta baja y está rematado por un gran reloj.

En los archivos del palacio se guardan los primeros títulos de tierras otorgados en la comarca durante el virreinato, entre otros valiosos documentos históricos.

Solo nos resta desearte un feliz viaje por los Pueblos Mágicos morelenses. Nos vemos pronto para otro maravilloso paseo.

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