Cuba despierta un creciente interés turístico por sus espectaculares playas, parques nacionales y ciudades de rica herencia colonial española y africana, además de que las necesidades de divisas fuertes promueven fantásticas ofertas para los viajeros.
Mucha gente se pregunta qué hacer en una semana en la bella isla, la más grande de las Antillas Mayores. Sigue leyendo para que sepas qué visitar en Cuba en 7 días.
La Habana
La Habana es la capital y ciudad más grande de Cuba. Durante la colonia fue la más cosmopolita de España en Hispanoamérica, una especie de joya de la corona española en el Nuevo Mundo. Fue fundada en 1514 por el conquistador castellano Pánfilo de Narváez y alberga dos zonas bien diferenciadas, La Habana Vieja y la parte moderna de la ciudad.
En La Habana Vieja están las principales atracciones históricas, como la Plaza de Armas, la catedral, varias fortalezas, el malecón, la Calle Obispo y otros lugares emblemáticos. Mientras que en La Habana moderna, se encuentran los principales barrios residenciales y comerciales, como Miramar y El Vedado.
En La Habana Vieja hay confortables hoteles para una placentera estadía mientras se conoce la ciudad. Te presentamos a continuación varias opciones: el Hotel Sevilla, Havana Dream, Conde D´ Ricla Deluxe Hotel Boutique y Hostal La Maestranza Habana.
En Miramar y El Vedado, muy cerca de La Habana Vieja, están otros magníficos alojamientos, como el Hotel Nacional de Cuba, Meliá Habana, Marqué de Liz y NH Capri La Habana.
Día 1: La Habana
Recorre la Calle Obispo
Esta es una de las calles más frecuentadas y famosas de La Habana Vieja y está cerrada al tránsito de vehículos. Es el bulevar más largo de la ciudad y ha sido una calle comercial desde que fue abierta en 1519. Está bordeada de tiendas, restaurantes, museos, antiguas farmacias y librerías.
Disfruta de la colorida arquitectura de la calle, que probablemente ya has visto en fotos, de la música en vivo y quizás de un antojo en un carrito de frutas o en un puesto de venta de churros.
Almuerza en El Chanchullero
Los bromistas dicen que este es el mejor bar de La Habana que no visitó Ernest Hermingway, un parroquiano habitual de los abrevaderos de la ciudad.
El daiquirí y el mojito de El Chanchullero no son tan famosos como los que bebía en El Floridita y en La Bodeguita del Medio el célebre novelista galardonado con el Nobel, pero saben ricos, así como la piña colada.
Es un bar y restaurante de tres niveles que sirve platos clásicos cubanos y tiene una terraza en la que esperamos que haya lugar cuando tú vayas.
Preparan divinamente la ropa vieja, el platillo típico cubano que es un guiso de carne de res deshebrada, acompañado de arroz blanco y rodajas de plátano frito.
Tómate un descanso y pasea por la Plaza de Armas
La Plaza de Armas fue la primera construida en San Cristóbal de La Habana en el siglo XVI. Está bordeada por edificaciones históricas, como el Templete, el Palacio de los Capitanes Generales y el Palacio del Segundo Cabo.
Pasea por la plaza y compra libros y algún recuerdo de tu estancia en La Habana. Si te gusta el cine y quieres un suvenir cinematográfico, busca a los vendedores que ofrecen impresiones y carteles de viejas películas.
Visita el museo del Palacio de los Capitanes Generales
Este palacio ocupa una manzana de La Habana Vieja y es el mejor testimonio arquitectónico del barroco en Cuba. Concluido en 1792 para uso de los capitanes generales españoles que gobernaban la isla, también fue asiento del gobierno estadounidense (1898-1902) y del republicano hasta los años 1920.
El museo está dedicado a la historia de Cuba e incluye una colección de banderas nacionales con los cambios que han tenido a lo largo del tiempo, armas, pinturas de personajes históricos, espejos venecianos, joyas, vajilla y un Salón del Trono hecho a semejanza del que se encuentra en el Palacio Real de Madrid.
Haz una parada para un mojito en NAO
Camina en dirección a la Calle Obispo hasta llegar al NAO Bar Paladar para disfrutar de un mojito de media tarde. El NAO está situado en un bonito callejón peatonal, entre la Plaza de Armas y el malecón y es un excelente bar y restaurante.
Es un lugar agradable y fresco para una relajante parada y habitualmente hay grupos de música cubana amenizando el ambiente. Es de precios accesibles y el personal atiende con calidez.
Sube a la azotea del Hotel Ambos Mundos a admirar el paisaje
Poco antes del ocaso, llega hasta este hotel de color rosado, situado en la Calle Obispo 153, y sube al restaurante que está en la terraza de la azotea para disfrutar de una vista estelar de La Habana y el mar.
Pasa por la habitación favorita de Ernest Hemingway, actualmente convertida en un museo. En el bar del lobby del hotel toca un pianista.
Cena en Habana 61
Este restaurante es una excelente opción para la cena, todo gracias a sus alimentos frescos y preparados con una sazón inigualable.
Se encuentra en la Calle Habana N° 61 (entre Cuarteles y Peña Pobre) y tiene una reputación de excelencia por la delicia de sus platillos y cocteles y la buena relación calidad-precio. La parrillada de mariscos y el cerdo al horno son fuera de serie.
Cierra la noche en El Floridita
Este bar icónico de La Habana Vieja es infaltable entre los lugares que visitar en Cuba en 7 días por su antigüedad e historia y porque era el sitio favorito de Hemingway para beber daiquirís. Fue fundado en 1817 y se le atribuye el invento del popular coctel tropical hecho a base de ron blanco y jugo de limón.
El bar es una especie de museo Hemingway, con una estatua del escritor acodado en un extremo de la barra, así como un busto en bronce y fotografías. Algunas celebridades que han pasado por El Floridita son Tennessee Williams, Giorgio Armani, Paco Rabanne, Jane Fonda, Pierce Brosnan, Jack Nicholson, Naomi Campbell y Fito Páez.
Día 2: La Habana
Conoce el Hotel Inglaterra, el más antiguo de Cuba
El Hotel Inglaterra es un hotel emblemático de La Habana se encuentra en el 416 del Paseo del Prado, entre las calles San Miguel y San Rafael. Es un elegante inmueble neoclásico inaugurado en 1875 y fue el sitio de hospedaje de Sir Winston Churchill cuando era un joven reportero militar que cubría la Guerra de Independencia cubana.
Tiene una icónica marquesina de vidrio y es un divertido lugar para tomar fotos de estilo retro. En la otra acera de la calle está una parada de los Buses Turísticos de La Habana, que hacen rutas por los lugares más interesantes de la ciudad, y será nuestra próxima propuesta en este paseo por Cuba.
Admira la ciudad desde los Buses Turísticos de La Habana
Este tour es recomendable por varias razones. En primer lugar, es muy barato y permite cubrir una gran extensión de La Habana en poco tiempo. Otro punto favorable es que después de haber caminado mucho el día 1, las piernas agradecerán un descanso en una ciudad que no se caracteriza por las facilidades de transporte público.
La parte superior es sin techo, lo que le viene bien a los aficionados a la fotografía, aunque quizás se necesite algo de bloqueador solar y un sombrero. Puedes subir y bajar cuantas veces quieras con el boleto del día y tiene paradas en muchos sitios de interés, incluyendo el Castillo de la Real Fuerza, el Acuario Nacional y la Plaza de la Revolución.
Para en la Plaza de la Revolución
Es un lugar simbólico de la capital cubana y una de las plazas más grandes del mundo, con 72000 km2. Se encuentra en la intersección de las avenidas Rancho Bolleros y Paseo y está presidida por el monumento a José Martí y el famoso mural dedicado a Ernesto “Che” Guevara.
El monumento a Martí tiene una altura de 142 metros hasta las banderas, lo que lo convierte en el punto más alto de La Habana. La imagen del Che Guevara es un relieve escultórico realizado por el artista Enrique Ávila, basándose en la mundialmente conocida foto del guerrillero tomada por Alberto Korda.
Visita el cementerio Colón y haz un coffee break en Cuba Libro
Después de tomar fotos en la Plaza de la Revolución, sube de nuevo al bus turístico y baja en la parada de la necrópolis de Cristóbal Colón. Este cementerio es famoso por la belleza de sus mausoleos y está considerado el segundo más importante del mundo en arte funerario.
Tras fotografiar la monumental entrada de la necrópolis, con su conjunto escultórico de mármol de carrara, y la tumba de algún personaje famoso, camina hasta el Café Cuba Libro para una relajante pausa. Es una cafetería y librería con una vibra hippie y gran cantidad de libros y revistas, en la que podrás disfrutar de un popular expreso cubano.
Cena en un paladar
Paladar es el nombre dado en Cuba a un restaurante montado por iniciativa privada, al margen de los administrados por el gobierno, y por lo general, su comida es de mejor calidad. El nombre fue sacado de una telenovela brasileña emitida en Cuba en los años 1990.
Sube de nuevo al bus turístico y baja en la parada más cercana al Restaurante Atelier (está cerca del Hotel Meliá Cohíba), un hermoso lugar ubicado en la Calle 5ta, entre Paseo y 2, en el Barrio El Vedado. Es uno de los mejores paladares habaneros y tiene una fresca terraza al aire libre, así como sala cerrada con aire acondicionado. La comida y los postres son muy ricos.
Socializa en la Fábrica de Arte
Este espacio cultural abre de 8 p. m. a 3 a. m., de jueves a domingo, y esperamos que estés uno de estos cuatro días en La Habana para conocerlo, porque vale la pena. Es una galería y club habanero que exhibe obras de arte y fotografías y presenta las galas artísticas más importantes de la capital cubana.
Funciona en un inmueble de 1910, que fue una fábrica de aceite de cocina, de allí el nombre del centro cultural. Fue inaugurada en 2014 por iniciativa de artistas y músicos cubanos y se ha convertido en lugar de encuentro de jóvenes habaneros y turistas ligados al mundo del arte. Se encuentra en la Calle 26.
Cierra la noche en el cabaret del Hotel Nacional de Cuba
Este hotel es otro símbolo arquitectónico e histórico de La Habana y de la república. Es una joya clásica inaugurada en 1930 que ha conservado su distinción y elegancia y mantenido su nivel de excelencia por encima de los cambios políticos en la isla. Fue el hotel favorito de las celebridades del pasado y lo sigue siendo de muchas de la actualidad que visitan la ciudad.
Sus galerías ajardinadas recuerdan los claustros monásticos hispano-morunos y su ecléctica arquitectura, que combina los estilos art decó, neoclásico y neocolonial, cautiva al visitante. Su cabaret estilo parisino presenta un espectáculo brillante y entretenido que está a nivel del Moulin Rouge o el Lido en París.
Trinidad
La noche del día dos, antes de salir a cenar, prepara tu equipaje y al día siguiente muy temprano haz el check out en tu hotel de La Habana, para partir en coche hacia tu próximo destino, Trinidad. Esta es otra bella ciudad que debes incluir en tu programa de lugares que visitar en Cuba en 7 días. Se encuentra en la Provincia de Sancti Spíritus, en la región central de la isla.
Será un viaje de 315 km a cubrir en unas cuatro horas, para ir de la costa norte a la sur, con parada para almorzar en Cienfuegos, ciudad en la ruta ubicada 83 km antes de llegar a Trinidad. Esta localidad fue fundada en 1514, lo que la hace la tercera villa más antigua de Cuba. Cuenta con uno de los centros históricos mejor conservados de América.
Trinidad es Patrimonio Mundial de la Humanidad y está en el Valle de los Ingenios, el territorio en el que Cuba desarrolló su potente industria azucarera que llegó a ser la primera del mundo y que guarda un interesante acervo de los siglos XVIII y XIX que forma parte de una ruta turística.
Día 3: Viaje La Habana-Trinidad, Almuerzo en Cienfuegos y Actividades en Trinidad
Viaja hasta Cienfuegos
El viaje de 233 km entre La Habana y Cienfuegos por la Autopista Nacional toma, aproximadamente, 2 horas 40 minutos. No tendrás tiempo de conocer a fondo esta ciudad, capital de la Provincia de Cienfuegos, pero al menos podrás echar un vistazo a sus principales lugares de interés y tomar algunas fotos.
Cienfuegos está en la Península de la Majagua y es llamada la Perla del Sur por su localización frente al mar y por la belleza de su centro histórico de influencia arquitectónica francesa, declarado Patrimonio de la Humanidad. Entre los lugares a mirar están la catedral, el Palacio de Valle, el Parque José Martí, el Arco de Triunfo y la Fortaleza de Jagua.
Almuerza en Cienfuegos
Si te apetece comida marinera, En Cienfuegos puedes almorzar en el Restaurante Pelícano, situado en los Altos de Punta Gorda, en la Avenida 0, entre las calles 35 y 37. Tiene una espectacular vista a la bahía. Sirve frescos pescados y mariscos y también tiene platillos de tierra entre los que sobresalen las costillas al carbón.
Si quieres comer rápidamente una pizza para continuar el viaje, puedes almorzar en Dinos Pizza, ubicado en la Calle 31, N° 5418. Está en un acogedor local con jardineras y tanto las pizzas como la lasaña son muy sabrosas. También sirve pastas con diferentes salsas.
Continúa el viaje hacia Trinidad
El trayecto Cienfuegos-Trinidad es de 83 km, con un tiempo estimado de viaje de 1 hora y 15 minutos.
Hospédate en Trinidad
En Trinidad, como en toda Cuba, es sencillo llegar y buscar un alojamiento. Como en las demás localidades de la isla, hay casas manejadas por amables y serviciales personas que ofrecen cuartos generalmente espaciosos a precios muy convenientes. Este método de alojamiento se ha popularizado como una forma de ganarse la vida en la isla.
También puedes reservar con anticipación en un hotel de Trinidad. Entre los mejores están Hotel E La Calesa, Memories Trinidad del Mar – All Inclusive (el antiguo Brisas Trinidad del Mar) y el Iberostar Heritage Grand Trinidad – Adults Only (un hotel 5 estrellas situado en la esquina de las calles José Martí y Lino Pérez).
Toma una lección de salsa
Después de instalarte en el hotel de Trinidad es muy probable que sean más de las 2 de la tarde. Si no necesitas descansar tras el viaje, sal a tomar una lección de salsa. Este ritmo musical es muy popular en Cuba y todo el mundo lo baila. Varios hostales y casas particulares ofrecen clases con profesores calificados.
No es necesario tener conocimiento previo para aprender rápidamente a bailar salsa. Solo tienes que mover los pies y tu hábil pareja hará el resto, llevándote poco a poco hasta hacerte un decente bailarín o bailarina. Una clase cuesta alrededor de 8 pesos cubanos convertibles (igual cantidad de dólares estadounidenses).
Cena en la Taberna La Botija
Este bar-restaurante es de los más demandados en Trinidad y, a pesar de que está abierto las 24 horas, puede haber cola a la hora de cenar, así que asegúrate de tomar las previsiones para no llegar en el horario pico. Tiene una amplia selección de platillos estilo tapeo, lo que permite abaratar tanto los tragos como la comida.
Funciona en una casa estilo rural situada en la esquina de las calles Amargura y Boca, N° 71-B y se come informalmente. La especialidad de la casa son las brochetas, exageradamente grandes y acompañadas de arroz, yuca y otras verduras. La relación calidad / precio del restaurante es imbatible en Trinidad y sirven una rica piña colada.
Baila salsa en la plaza
Después de cenar, dirígete a la Plaza Mayor, que es el punto de reunión de Trinidad para bailar salsa. El precio de entrada al área de baile, incluyendo un asiento, es de aproximadamente 1 CUC (1 USD).
Si eres una chica, ten en cuenta que algún cubano o un turista te invitará a bailar sin importar que te estén viendo por primera vez. Se espera que los chicos actúen con las mismas libertades.
La Plaza Mayor será el primer lugar público en el que exhibirás tus destrezas recién adquiridas en el baile de la salsa, pero no te inhibas, ya que los cubanos son muy amables y se desviven por hacerle pasar un rato agradable a los visitantes, sobre todo si están comenzando a bailar uno de sus géneros musicales icónicos.
Finaliza la noche en el Rincón de la Salsa
La salsa es un género musical muy pegajoso y si todavía no has tenido suficiente en tu primer día en Trinidad, camina hasta el Rincón de la Salsa para rematar tu faena bailable. Este divertido rincón se encuentra en el patio del Restaurante Plaza Mayor, situado en la Calle Rosario, en pleno centro histórico de Trinidad.
La música y el baile comienzan todos los días a partir de la 9.30 p. m. e incluye tanto presentaciones en vivo como grabaciones. Es un programa cultural que va más allá de pasar un rato divertido en la noche, ya que a lo largo del día hay clases de baile, coctelería, percusión y español.
Día 4: Trinidad
Explora el centro histórico de Trinidad
Después de desayunar, dedica la primera parte de la mañana a explorar el centro histórico de Trinidad. Ya conociste la Plaza Mayor, pero era de noche y estabas bailando salsa. Con la luz del día podrás apreciar las casas señoriales de los siglos XVIII y XIX que la rodean, las cuales pertenecieron a ricos terratenientes de la caña de azúcar.
El Museo de Historia funciona en el antiguo Palacio Cantero y exhibe piezas y documentos de la época del esplendor azucarero de la villa trinitaria. El Museo de Arqueología Guamuhaya está en la antigua Casa de Padrón y contiene una colección de objetos aborígenes de las etnias que vivían en la región y artículos de la época colonial.
El Museo Romántico recrea la típica casona colonial trinitaria de mediados del siglo XIX, con su mobiliario y decoración de época. Se encuentra frente a la Plaza Mayor, en la mansión que perteneció a los Condes de Casa Brunet.
Otros lugares de interés son el Museo de Arquitectura Colonial, que ocupa la antigua casa de los Sánchez Iznaga, y la Casa de la Trova, un centro de música.
Báñate en la Playa María Aguilar
Tras conocer las atracciones históricas de Trinidad, regresa al hotel y prepara un bolso de playa para ir en el coche o en un taxi a la Playa María Aguilar, que está a 20 minutos del centro de Trinidad. En este exótico arenal de la costa sur de Cuba, de aguas transparentes y calmadas como una alberca, no es extraño ver a cubanos que van a refrescarse en coches de tracción animal.
Tiene una amplia franja de arena y sus aguas azul turquesa son ideales para un chapuzón, ya que en la orilla no hay los espesos arrecifes que caracterizan a otras playas de la zona.
No es para pasar una larga jornada, ya que carece de sanitarios, pero sí excelente para bañarse y tomar un rato el sol. Tampoco hay buenos restaurantes, por lo que te recomendamos retornar a la ciudad para almorzar.
Almuerza en Sapori Italiani
El Bistró Trinidad es un restaurante situado en una calle tranquila y tiene varios niveles, incluyendo una terraza panorámica con magníficas vistas. Ofrece un excelente servicio y una carta corta, pero de platos muy ricos, entre los que sobresalen la langosta y el pulpo a la brasa.
Se encuentra en la Calle Encarnación, N° 34, entre Pablo P. Girón y Ciro Redondo, en una bonita casa que perteneció al primer alcalde de la ciudad.
Tiene platos de pescado, mariscos y carne y un gran árbol de mango que proporciona el postre gratuito en temporada del fruto.
Entre el follaje se dejan ver algunos colibríes, mientras los comensales beben un canchánchara, coctel a base de aguardiente, miel y limón inventado en Trinidad durante la Guerra de Independencia contra España.
Cabalga por el campo de Trinidad
Tras descansar un ratito en el hotel, sal a realizar una aventura a caballo por el Valle de los Ingenios Azucareros y los bellos campos trinitarios. De 2:00 a 3:00 de la tarde es un buen momento para iniciar esta excursión, que dura casi 4 horas, para finalizarla al atardecer, poco antes de la puesta del sol.
Tras contactar previamente al operador turístico del tour, este pasa por tu hotel a la hora acordada y luego van en busca de los caballos. El paseo lleva por parajes llenos de vegetación y por riachuelos, subiendo hasta una colina desde la que puede admirarse el mar y la ciudad colonial de Trinidad. En una zona de cascadas y pozas puedes darte un refrescante chapuzón.
Cena en La Redacción
Este restaurante y bar recibe su nombre porque funciona en una casa típica del siglo XIX en la que era redactado e impreso el periódico El Liberal. El inmueble fue restaurado conservando todo su encanto tradicional, incluso el aviso antiguo del periódico. Se encuentra en la Calle Gutiérrez 463, entre las calles Simón Bolívar y Francisco Javier Zerquera de Trinidad.
El restaurante, con una cocina de pinceladas francesas, cultiva sus propias hierbas y verduras, fabrica su propio pan y trabaja con la pesca del día y con carnes locales.
Entre sus platos principales están la panceta de cerdo y la langosta, cocinados en un tradicional horno de piedra. La hamburguesa La Redacción, de cordero o cerdo y un pan casero, sabe de maravilla, acompañada con batatas (camotes) fritas.
Baila toda la noche en una cueva
Después de cenar, dirígete a la Disco Ayala, un local nocturno situado en una cueva natural, en el que disfrutarás de una noche de baile subterránea.
Es un lugar muy original con mucho público y buen ambiente, y es una de las paradas obligadas en las noches de fiesta trinitarias. También es llamada La Cueva por encontrarse en la cima de una colina, en un sector llamado Las Cuevas.
Es una ocasión ideal para departir con personas de otros países, ya que la mayoría de los extranjeros que visitan Trinidad, especialmente los jóvenes, pasan por La Cueva. Forma parte del Hotel Las Cuevas, tiene buena música y los precios de las bebidas son razonables.
En el camino de subida a la colina hay puestos de venta de bebidas. No te pases de tragos, porque al día siguiente tendrás un largo viaje.
Viñales
Tras un reparador sueño, después de una noche de baile encuevado, tendrás que desayunar y alistarte para un viaje de 497 km y unas 7 horas hasta Viñales, pequeña ciudad de la occidental Provincia de Pinar del Río, que es una fantástica parada en tu itinerario de lugares que visitar en Cuba en 7 días.
Sería ideal que pudieras realizar este viaje en un auto con chofer, que no es difícil de conseguir en Trinidad, para que puedas dormir un rato y terminar de recuperarte de la juerga.
El Valle de Viñales es uno de los parajes naturales más hermosos de Cuba, así como el asiento principal de la famosa industria tabacalera de la isla.
En el valle se encuentran las grandes plantaciones de tabaco y las fábricas en las que se tuercen a mano los puros de las marcas más icónicas, como Cohíba y Vegas Robaina.
Visitar Viñales es ver la auténtica Cuba, ya que la ciudad es pequeña (de menos de 10000 habitantes) y tradicionalista y pareciera que todo el mundo se conoce por su nombre.
Día 5: Viaje Trinidad-Viñales, Almuerzo en la ruta y Actividades en Viñales
Viaje hacia Viñales
El viaje de Trinidad a Viñales es de 497 km por la Autopista Nacional y la Autopista Este-Oeste.
Volverás a pasar por Cienfuegos, así como por la entrada de La Habana, para luego enfilar hacia San Cristóbal (Provincia de Artemisa), Consolación del Sur (una de las ciudades y municipios más importantes de la Ruta Cubana del Tabaco, ya en la Provincia de Pinar del Río) y finalmente Viñales.
Almuerza en la ruta algún platillo de la deliciosa gastronomía isleña, como el cochinillo asado a la cubana, preparado a la brasa, la pieza entera, con el mismo estilo del cochinillo a la segoviana en España. Si sales de Trinidad antes de las 10:00 a. m., estarás llegando a Viñales en torno a las 5:00 p. m.
Hospédate en Viñales
También en Viñales podrás escoger entre las informales casas de huéspedes, de ambiente familiar, y un hotel más formal. Villa Farners es una pequeña y modesta casa situada en la Calle Salvador Cisneros 10A, muy cerca de la avenida principal de Viñales.
Este bed and breakfast es manejado por una amable pareja y cuenta con aire acondicionado, baño con ducha, estacionamiento y Wi-Fi gratuitos, jardín y terraza. Los desayunos y vistas desde la azotea son espectaculares.
Otras casas de alojamiento son Hostal Noemí Vingales (Salvador Cisneros, 2), Casa Yosleidy (Rafael Trejo, 4A), Hostal Maura y Erwin (Salvador Cisneros 131) y Casa Frank y Yaniris (Rafael Trejo, final interior).
Entre los hoteles destacan Hotel E Central Viñales (Esquina de Salvador Cisneros con Ceferino Fernández) y Hotel Horizontes La Ermita (km 1 ½ de la carretera a La Ermita).
Sube a la azotea de tu casa de huéspedes para admirar el ocaso
Las puestas de sol en Viñales son aproximadamente a las 6:00 p. m. en invierno y a las 7:40 p. m. en verano, así que tendrás tiempo de descorchar una botella de vino y subir a la azotea de tu casa de alojamiento para ver un espectacular ocaso con el sol poniéndose sobre el valle.
Invita a tus anfitriones y sostén con ellos una amena charla sobre tantas cosas mágicas que tiene Cuba. Quizás sea el momento para que le des un par de chupadas a un puro, aunque solo sea para vivir la experiencia en el corazón de la Ruta Cubana del Tabaco.
Cena en Cubar
Si te has hospedado en Villa Farners, solo tendrás que hacer una corta caminata hasta el Restaurante Cubar, que está en la misma Calle Salvador Cisneros de la casa de huéspedes. Se encuentra en el número 55, junto al Parque Estatal de Viñales, y es un bar-restaurante que sirve comida caribeña e internacional.
Tiene variada coctelería, una excelente carta, comida deliciosa y esmerada atención, además de una agradable decoración. Mucha gente no solo cena, sino que termina de pasar su jornada nocturna en la terraza con vista a la calle de Cubar.
Para comer, los espaguetis de langosta, el solomillo de puerco al vino blanco y el pulpo son fabulosos. Comida fresca y gourmet y una de las mejores barras de Cuba se juntan en Cubar.
Baila en la Plaza Mayor
Camina unos minutos hasta la Plaza Mayor de Viñales, que se encuentra frente a la parroquia. En la plaza está la Casa de Música Polo Montañez, una opción nocturna fantástica en Viñales, ideal para pasar un rato entre mojitos, daiquiris y piñas coladas, escuchando y bailando los ritmos más populares en Cuba, como la salsa, la bachata y el merengue.
Este es el bar más frecuentado de Viñales y el lugar perfecto para que termines de hacerte un consumado bailarín de salsa. Hasta las personas más tímidas terminan por mover los pies en la Casa de Música Polo Montañez y es un sitio para charlar con los cubanos y turistas extranjeros, mezclándose con los bailes y costumbres de la isla.
Día 6: Viñales
Recorre Viñales en el autobús local
Después del desayuno en la casa de huéspedes, sube al autobús local de Viñales, que tiene paradas cerca de museos, tiendas de tabaco y otros lugares de interés de la ciudad. Es la manera más conveniente de movilizarse en Viñales y a menudo sale más barato que hacer un recorrido en taxi.
Las atracciones del casco central de Viñales pueden conocerse perfectamente caminando, pero si estás pensando en explorar un poco más allá, esta es la mejor opción. La parada principal de los autobuses locales se encuentra en la Plaza Mayor.
Detente en algunos lugares de interés
Viñales tiene museos y otros lugares de interés que bien valen unas paradas para un rápido recorrido. Más o menos en la mitad de la Calle Salvador Cisneros se encuentra el Museo Municipal Adela Azcuy, que funciona en la casa natal de esta patriota que alcanzó el grado de capitán durante la Guerra de Independencia cubana.
Está en un inmueble del siglo XIX que alberga fósiles y piezas de la historia natural regional, así como objetos y documentos que pertenecieron a las principales personalidades históricas de Viñales. Un poco más alejado del pueblo se encuentra el Museo Paleontológico, ubicado cerca del Mural de la Prehistoria y del campismo Dos Hermanas.
Exhibe una colección de fósiles y objetos arqueológicos recogidos por el guajiro Juan Gallardo Cordero cuando acompañó al científico y político revolucionario Antonio Núñez Jiménez en su recorrido por los valles. El Mural de la Prehistoria es una obra de arte contemporánea de inspiración naturalista, realizada por el pintor Leovigildo González Morill en una pared natural de piedra.
Almuerza en la Finca Agroecológica El Paraíso
Cuando sientas el gusanillo del hambre, dirígete a la Finca Agroecológica El Paraíso para disfrutar del mejor almuerzo en Viñales. En esta granja familiar preparan comida cubana y caribeña utilizando sus propios productos orgánicos (verduras, hierbas aromáticas, frutos). Está en el km 1 ½ de la carretera al cementerio de Viñales y las porciones son asombrosamente grandes.
Si vas cuando los autobuses turísticos ya se han retirado, comerás con más comodidad y con una atención más rápida. Todo se prepara al carbón y sin aditivos químicos y la comida es al precio cerrado de 12 CUC (12 USD). Tienen una deliciosa piña colada y algunos cócteles de creación propia.
El restaurante se encuentra en una colina y las vistas del Valle de Viñales y de las puestas de sol son maravillosas.
Visita la Casa Jardín Botánico de Caridad
Tras volver al pueblo y tomarte un descanso, te recomendamos conocer esta casa de huéspedes, ideal para alojar a las personas que gustan de respirar y de dormir entre los aromas y colores de la naturaleza.
Es un lugar de techos altos insertado en un entorno boscoso, con unos bonitos espacios ajardinados en los que hay árboles, orquídeas, flores tropicales y otras plantas ornamentales, y es lo más parecido a un jardín botánico en Viñales. Los guías dan explicaciones detalladas sobre las especies de flora del jardín y esperan una propina.
Se encuentra a 7 minutos de Viñales y pertenece a las hermanas Carmen y Caridad, aunque la segunda se quedó con el nombre.
Cena en el Paladar El Campesino
Este paladar de ambientación cubana se encuentra en la Calle Salvador Cisneros 35 y se especializa en comida criolla, latina y parrilladas. Las raciones son generosas, la cerveza siempre está fría y las vistas del Valle de Viñales son espléndidas. Atienden con amabilidad.
Entre los platillos de la carta se encuentran pollo, lonjas de cerdo y costillitas al carbón, carne asada, cerdo ahumado y una sabrosa ropa vieja acompañada de tres tipos de arroz (blanco, dulce con piña y con porotos negros).
Tiene un menú cerrado de 10 CUC y el cliente selecciona entre pescado, mariscos o carne, pagando las bebidas aparte. Las guarniciones son abundantes.
Termina la noche en el Palenque de los Cimarrones
Para tu última noche en Viñales, te recomendamos este club y restaurante ubicado en una caverna, en el km 36 de la carretera a Puerto Esperanza. La cueva viene con su lección de historia, ya que era utilizada por los cimarrones (esclavos que escapaban de las plantaciones de tabaco) para esconderse.
Si tu estancia en Viñales coincide con un sábado en la noche, disfrutarás de una presentación musical. En esta disco podrás bailar hasta la media noche o la madrugada, mientras te adentras en algunas peculiaridades de la cultura afrocubana.
Día 7: Viñales y regreso a La Habana para el viaje de retorno
Explora la cueva más grande de Cuba
Levántate temprano para una última excursión por el Parque Nacional Valle de Viñales, para conocer la Caverna de Santo Tomás, que forma parte de las grutas más grandes de Cuba. El recorrido dura aproximadamente hora y media y el interior de la cueva es fresco, contrastando con el caluroso exterior.
Es un lugar para admirar las estalactitas y otras formaciones rocosas y aprender un poco sobre la geología de Cuba.
Las cuevas se formaron por procesos kársticos y en su interior conservan expresiones artísticas realizadas por los esclavos cimarrones que se ocultaban en ellas. El parque fue declarado Patrimonio de la Humanidad por su belleza natural y riqueza cultural.
Viaja de regreso a La Habana
Haz la valija, despídete de tus anfitriones y toma el camino de regreso a La Habana en un taxi compartido. El viaje de 183 km entre Viñales y la capital de Cuba toma 2 horas y fracción por la Autopista Este-Oeste, por lo que estarás llegando a La Habana a la hora de almorzar.
Alquila un descapotable vintage para tu último paseo por La Habana y traslado al aeropuerto
Para pasar tus últimas horas en La Habana, antes de abordar el vuelo de retorno, te recomendamos contratar un descapotable de los años 1950.
Los afortunados cubanos que poseen estas joyas clásicas las conservan como la niña de sus ojos y hacen a la vez de conductores y guías turísticos.
Pídele a tu chofer que te lleve a tomar un rápido almuerzo (si no los has consumido antes de contratar el coche) y que luego te pasee por los lugares de interés habaneros que no hayas conocido al comienzo de tu estancia en Cuba.
Este viaje es la forma perfecta de salir con estilo de La Habana, asegurando al mismo tiempo el traslado al aeropuerto.
Prueba la mejor piña colada de La Habana
Antes de ir al aeropuerto, para en el Parque Almendares para una piña colada más en suelo cubano. La preparan en una cabaña que está en la orilla del río y seguramente tu conductor conoce el lugar.
Dirígete al aeropuerto y despídete de la hermosa y animada isla hasta una próxima oportunidad.
Qué visitar en Cuba en 7 días: La Bodeguita del Medio
Si te alcanza el tiempo, al comienzo o al final de tu viaje en La Habana, pasa un rato por La Bodeguita del Medio, icónico bar-restaurante y el lugar preferido por Ernest Hemingway para tomar sus mojitos. Se encuentra en la Calle Empedrado, N° 207, de La Habana Vieja.
Fue inicialmente una tienda de abarrotes y a partir de 1948 empezó a vender comidas y bebidas y a ser frecuentada por personajes como Hemingway, Gabriela Mistral, Pablo Neruda y Agustín Lara.
Algunos ilustres visitantes dejaron su huella mediante firmas, fotos y grafitis, incluyendo el expresidente chileno, Salvador Allende, y el actor australiano-estadounidense, Errol Flynn.
Esperamos que este artículo sobre que visitar en Cuba en 7 días te haya parecido interesante y que lo compartas con tus amigas y amigos de las redes sociales para que también tengan este itinerario para un futuro viaje a la Perla de las Antillas.
Ver también:
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- Te dejamos nuestra guía con los 40 mejores lugares turísticos en Puerto Rico que debes visitar