El Oro de Hidalgo es una pequeña ciudad del estado de México, con un pasado minero que ha marcado su interesante historia, primero como actividad industrial y ahora como medio de atracción turística. Te invitamos a conocer las 12 principales cosas que hay para ver y hacer en esta acogedora localidad.
1. Iglesia de Nuestra Señora de Guadalupe
Este templo de arquitectura sencilla fue consagrado en el siglo XIX en honor de Nuestra Señora de Guadalupe, santa patrona de México y del continente americano. Su fachada es muy sobria y cuenta con dos campanarios. En el interior predomina el estilo neoclásico y sus piezas más llamativas son las imágenes de la Virgen de Guadalupe, el Sagrado Corazón de Jesús y San José; un vitral ornamentado con rosas y un retablo de la virgen. El retablo está elaborado en mosaicos de colores y tiene incrustaciones de oro.
Como todas las ciudades, pueblos y aldeas de México, El Oro se viste de fiesta cada 12 de diciembre para celebrar la festividad de la Virgen de Guadalupe. La imagen sagrada es sacada en procesión, en medio de los fuegos artificiales y la veneración popular. Por supuesto, no faltan la música, las verbenas y los espectáculos folclóricos.
2. Minas de oro
Mucho antes de adoptar su nombre áureo, El Oro fue una humilde comunidad de indígenas mazahuas que vivían de la agricultura, especialmente maíz y frijol. Las vetas de oro y plata fueron descubiertas en el siglo XVI por los conquistadores españoles, quienes iniciaron la explotación de los metales preciosos. El nombre oficial de El Oro de Hidalgo fue decretado en 1902.
El metal dorado extraído de El Oro fue considerado en su momento como el N° 2 en fineza a nivel mundial, después del de una mina sudafricana. Cuando las minas cerraron sus operaciones a finales de la década de los años 1950, terminó una época de esplendor para la población, que tuvo que reorientarse hacia otras actividades para lograr el sustento, entre estas el turismo. Quedan las minas como testimonio de la era dorada.
3. Museo de la Minería
Este museo rememora, a través de fotos, planos, documentos, muestras de minerales, herramientas, equipos y componentes, la historia de la minería de oro y plata en El Oro de Hidalgo. Funciona en una casa típica de la época porfiriana, cerca de la entrada de la mina La Providencia. Esta excavación llegó a tener 300 metros de profundidad, con galerías a varios niveles, y el museo exhibe impresionantes fotos de sus principales fosos, así como de los equipos e instrumentos utilizados para extraer el mineral aurífero y de plata, y para llevarlo a la superficie.
El museo abrió sus puertas en 1975, unos 15 años después de que la cooperativa minera que había sustituido a la empresa inglesa, cesara sus actividades.
4. Tiro Norte
Los viejos tiros mineros eran los sistemas con poleas y plataformas, sostenidos con estructuras de madera, que se utilizaban en las minas para subir a la superficie y bajar a las profundidades a obreros, materiales, maquinaria y cualquier otra cosa que se necesitara en los niveles subterráneos. Frecuentemente eran instalaciones precarias o mal mantenidas, que ocasionaban graves accidentes.
El Tiro Norte fue rehabilitado con fines turísticos. Cuenta con un piso transparente para apreciar la profundidad del foso y con un mirador desde el que se puede admirar parte de la localidad de El Oro en la lejanía. También hay un pintoresco teatro al aire libre.
5. Socavón San Juan
Los socavones son las excavaciones, a veces de miles de metros, que se practican en tierra y roca para desarrollar la actividad de extracción minera. El propio trabajo de minería se realiza en los corredores horizontales en diferentes niveles de las fosas verticales. En estos espacios, los mineros tienen todo lo necesario para trabajar y sobrevivir en las profundidades, incluyendo imágenes de vírgenes y santos a quienes se encomiendan durante sus peligrosas labores.
El socavón San Juan fue rehabilitado para que los visitantes puedan rememorar los esfuerzos y riesgos de los mineros de El Oro para ganarse la vida. Allí puedes ver herramientas de trabajo, góndolas para el transporte de mineral y una estatua en honor al minero.
6. Teatro Juárez
En medio del auge económico dictado por la explotación de las minas de oro, en 1906 comenzó la construcción de un majestuoso teatro en El Oro. La población estaba creciendo intensamente, con mucha gente llegada de otros lugares, y las autoridades se abocaron a este proyecto como forma de proporcionar un sano esparcimiento.
La bella edificación en estilo neoclásico fue terminada dos años después y estrenada con una función de zarzuela. Son admirables su sobria fachada de piedra, las puertas en madera tallada y la decoración morisca y en arte nouveau.
El Oro llegó a tener tanto músculo económico, que por el Teatro Juárez pasaron a lo largo de la primera mitad del siglo XX, figuras de renombre mundial tales como el tenor napolitano Enrico Caruso, la soprano florentina Luisa Tetrazzini y la vedette española María Conesa. Actualmente abre sus puertas tanto a las manifestaciones de alta cultura como a la cultura pop.
7. Palacio Municipal
Igual que el Teatro Juárez, esta edificación declarada Monumento Histórico Nacional fue construida durante la década de los años 1900, en medio de la época de esplendor de la población. Su arquitectura es una armoniosa mezcla de los estilos neoclásico y modernista. La fachada y los barandales son neoclásicos, así como las jardineras y las lámparas. El pórtico, el remate de la nave central y el salón de cabildos, que conserva su decoración original en magníficas condiciones, son en Arte Nouveau.
En el palacio puede admirarse el mural Génesis Minero, del artista plástico mexicano Manuel D´Rugama. En 2010, en el marco de su primer centenario, fue escenario de una intensa actividad cultural.
8. Estación del Ferrocarril
La minería en El Oro, desarrollada por la empresa El Oro Mining and Railway Co. Ltd hizo posible el enlace ferroviario de la localidad con parte de la red ferrocarrilera existente. En diciembre de 1899, el presidente de la república, Porfirio Díaz, puso en servicio la línea de Tultengo a El Oro, San Onofre y Yondeje. Posteriormente, El Oro fue conectado con la Ciudad de México de manera directa, aunque el servicio estuvo operativo hasta 1942.
En El Oro se conserva la estación del antiguo ferrocarril, donde ahora funciona un museo alusivo a la actividad. Puedes visitarlo a un precio muy solidario. Frente a la estación hay un pintoresco restaurant que fue montado dentro de uno de los vagones que prestaban servicio en el ferrocarril. Allí puedes ordenar comida mexicana o internacional, mientras ves fotografías antiguas.
9. Presa Brockman
Este cuerpo de agua con su amplio espejo rodeado de cedros, pinos y otros árboles, es un lugar ideal para observar la naturaleza, descansar y practicar actividades de entretenimiento al aire libre. Está situado a unos 10 minutos de El Oro y allí puedes pescar truchas, hacer ciclismo de montaña y pasear a caballo. También puedes pasear en cuatrimotos o simplemente echarte en la hierba a relajarte con el paisaje y a disfrutar de una comida campestre. El lugar está rodeado de bellas fincas, cuenta con restaurant y es posible acampar o rentar un bungalow.
10. Cascada El Mogote
A pocos minutos del centro de El Oro está esta hermosa cascada, que te pone en conexión inmediata con la naturaleza. Desde su puente colgante puedes hacer unas espectaculares fotografías de la caída de agua y del paisaje circundante. Si te animas, puedes generar algo de adrenalina, desplazándote en la tirolesa de ida y vuelta.
Abajo un video de la cascada el Mogote:
11. Ver mariposas monarca
El Oro alberga varios santuarios de la mariposa monarca, el bello lepidóptero caracterizado por su coloración naranja y negra, que es también el insecto que realiza la migración más larga. Huyendo del crudo invierno, viaja 4000 kilómetros entre Canadá y México y una de sus estaciones predilectas de llegada es la región montañosa cercana a El Oro de Hidalgo. La Mesa, el santuario que queda más próximo a la población, está a unos 50 minutos, en la base de las montañas que separan a los estados de México y Michoacán.
12. ¡A beber y a comer!
Los mineros son gente que necesita reponer muchas calorías, por lo que El Oro tiene una tradición culinaria que une la abundancia con la delicia. Los platos más demandados son el mole tradicional de guajolote (pavo), las carnitas y la barbacoa de carnero. Para beber, los pobladores de El Oro prefieren su bebida típica, la «chiva» preparada con anís y hierbas locales ¡Tómala con moderación!
¿Te gustó el paseo por El Oro? ¿Sentiste vértigo en sus profundas cavidades mineras? ¿Te pasaste de «chivas»? ¡Recupérate, para emprender pronto nuestro próximo viaje!
Recientemente existe la posibilidad se hacer Senderismo Minero y ciclismo de montaña en El Oro, por parte de una asociación de nombre -Senderismo El Oro- te llevan al bosque donde se encuentran muchos vestigios mineros, e incluso realizan recorridos nocturnos al bosque