Los viajes en solitario puede ser una de las maneras más gratificantes para explorar el mundo. Ya sea que prefieras parar en una isla desierta o en una ciudad desenfrenada, aquí están los mejores lugares para viajar solo.
1. Cuba
Los estados comunistas siempre están ávidos de divisas y ofrecen condiciones de cambio de moneda muy favorables para los turistas que llevan dinero duro.
Cuba tiene además un conjunto de atractivos que encantarán a un turista que viaje solo, como sus excelentes playas, hoteles y centros de diversión, en los que las bebidas tropicales son muy baratas.
Otra ventaja de Cuba para los viajeros es que el férreo control de la sociedad por parte de los aparatos de seguridad del estado mantiene los índices delictivos en niveles casi inexistentes, por lo que podrás disfrutar de la isla antillana con total tranquilidad.
Los admiradores de los coches viejos disfrutarán de un verdadero parque temático en las calles de La Habana y demás ciudades cubanas, apreciando modelos de los años 1940, 1950 y 1960, que siguen circulando milagrosamente gracias al ingenio de los mecánicos de la isla.
2. Guatemala
Guatemala ofrece un cambio conveniente entre el dólar estadounidense y el quetzal guatemalteco, lo que facilita la vida a los turistas en el país centroamericano.
Guatemala reúne singulares atractivos arqueológicos, arquitectónicos y naturales. Entre los primeros se encuentran los sitios mayas, encabezados por el Parque Nacional Tikal, declarado Patrimonio de la Humanidad.
La Antigua Ciudad de Guatemala es una bella muestra suspendida en el tiempo de la arquitectura colonial española.
El también llamado “país de la eterna primavera” cuenta con costas en los dos océanos, con encantadoras playas en ambos lados, y en medio, espectaculares parajes naturales, encabezados por sus lagos y volcanes.
3. Kenia
La república del centro – oriente de África, con costa en el Océano Índico, se enorgullece de contar con ecosistemas en los que puedes admirar a los “cinco grandes” del continente negro: elefante, rinoceronte negro, búfalo, león y leopardo.
Otra cosa que disfrutan a plenitud los visitantes que van solos a cazar o a observar la biodiversidad es la floreciente vida nocturna de Nairobi, la capital, y demás grandes ciudades keniatas.
El país cuenta además con buena infraestructura vial y de alojamientos. Aparte de sus parques nacionales y reservas naturales selváticos y de pradera africana, otros interesantes atractivos de Kenia son las hermosas playas y los arrecifes coralinos de Malindi y la Isla Lamu.
4. Isla Sur, Nueva Zelanda
Isla Sur es la más grande del archipiélago neozelandés y también la que reúne en mayor cuantía los lugares y facilidades que buscan los entusiastas de una gran cantidad de entretenimientos al aire libre, como esquí, senderismo, kayak, puenting, esferismo, paracaidismo, motonáutica, equitación y rafting.
El fiordo Milford Sound, los glaciares Fox y Franz Josef, la Península de Otago, el Parque Nacional de Fiordland y el Lago Wanaka ofrecen los parajes más espectaculares para el disfrute de los paisajes y la práctica deportiva.
El Parque Nacional Aoraki / Mount Cook, los Alpes Neozelandeses, el fiordo Doubtful Sound y el Lago Wakatipu son otros maravillosos espacios naturales del país oceánico.
5. Barcelona, España
La capital catalana es elegante, cosmopolita y está repleta de atractivos para hacer las delicias de los viajeros solos.
Es una ciudad que puede disfrutarse con bajo presupuesto si sabes lo que hay que hacer, como comer “tapeando” al estilo español en sus acogedoras tabernas, utilizar el transporte público y asistir a los múltiples espectáculos culturales gratuitos o de reducido costo.
La majestuosa arquitectura de la “ciudad condal”, encabezada por el Templo de la Sagrada Familia, el Parque y el Palacio Guell, y la Catedral de la Santa Cruz y Santa Eulalia, es otro conjunto de atracciones que se puede admirar sin pagar.
6. Irlanda
Si andas solo por Irlanda y quieres amena charla, instálate en un taburete de un vetusto bar irlandés, pide una pinta de cerveza y espera pocos minutos a que el parroquiano de al lado se convierta en tu amigo para toda la vida o al menos para toda la noche.
Irlanda es una república de gente muy trabajadora, cuyo principal entretenimiento en los ratos libres es beber cerveza, de preferencia, Guinness.
Los pubs y cervecerías irlandeses son escenarios frecuentes de pequeñas bandas que interpretan la música celta, civilización fundadora de la nacionalidad.
En la costa oeste irlandesa encontrarás algunos de los lugares más imponentes del país, como la isla de Skellig Michael, el sitio histórico Roca de Cashel y la Montaña de Croagh Patrick.
7. Nepal
Puedes ir a Nepal como alpinista, a ascender una de sus 8 cumbres que forman parte del grupo de los “Ochomiles”, los 14 picos con más de 8 mil metros sobre el nivel del mar que hay en la Tierra, incluyendo el Everest.
También puedes aprovechar la sed de la república del Himalaya por las divisas fuertes e ir allá como excursionista o senderista en circuitos de gran altitud, como el de Annapurna. En el camino vas conociendo a los pobladores y empapándote de sus costumbres y tradiciones.
Si solo te apetece descansar y observar, las montañas nepalíes ofrecen el aire más puro del planeta y los paisajes más sobrecogedores.
Finalmente, si sientes atracción o curiosidad por las culturas hinduista y budista, Nepal te ofrece la posibilidad de conocer ambas, con sus gurús, monjes, templos y estupas.
8. Nueva York, EE.UU
Nadie puede sentirse solo en la Gran Manzana aunque haya viajado sin compañía. Los museos neoyorquinos, como el Smithsoniano, el Guggenheim y el MOMA, están repletos de arte e historia natural y siempre están llenos de gente.
Pasear por el Central Park, hacer un tour por el Hudson, ver una película al aire libre en Prospect Park, asistir a una misa góspel y tomarte una foto en Times Square, son algunas de las cosas gratuitas o muy baratas que puedes hacer en Nueva York.
Si andas en la onda deportiva, puedes presenciar un partido de beisbol de los Yanquis o de los Mets, un juego de baloncesto de los Knicks o un encuentro de fútbol americano de los Giants.
Si en cambio estás de vena gastronómica, Nueva York te ofrece desde los más encumbrados restaurantes hasta puestos callejeros con comida económica y deliciosa.
9. Hokkaido, Japón
Hokkaido es la segunda isla más grande de Japón, separada de Honshu, la más grande, por un túnel ferroviario submarino.
Su capital, Sapporo, fue la cuna de la famosa cerveza del mismo nombre, cuya primera botella se llenó en 1876, siendo la espumosa más antigua de Japón. En 1972, Sapporo montó los Juegos Olímpicos de Invierno.
La isla de Hokkaido es también conocida por sus facilidades para la práctica de deportes al aire libre en las faldas nevadas de sus montes, ríos, lagos de calderas y lagunas.
Igualmente, Hokkaido cuenta con relajantes balnearios de aguas termales y con maravillosos parajes para la observación de la biodiversidad, especialmente aves.
10. Sur de Tailandia
El sur de Tailandia, a pocos grados del ecuador, es una zona de clima tropical durante todo el año. En esta parte del reino asiático hay islas y playas espectaculares tanto al este por el lado del golfo como al oeste por la costa de Andamán.
Tailandia es un destino muy barato. Allí puedes conseguir un bungaló por 4 dólares al día, incluyendo el desayuno, mientras que en un puesto callejero puedes hacer una deliciosa comida por menos de un dólar.
Palacios, templos budistas y diversiones nocturnas menos santas te esperan en Tailandia.
11. Sri Lanka
Esta isla montañosa, la antigua Ceilán, cuyos habitantes son mayoritariamente budistas, cuenta con hermosas playas en sus costas, mientras que en el interior se encuentran ciudades antiguas, reservas forestales, las plantaciones del mejor té del mundo y montañas sagradas.
Sigiriya es un yacimiento arqueológico ceilandés del siglo V que fue declarado Patrimonio de la Humanidad y es uno de los principales destinos turísticos de la isla.
Los observados de la vida natural pueden ver el Elefante de Sri Lanka, nativo de la isla y la subespecie más grande de elefante asiático.
El Templo del Diente de Buda, erigido en el siglo XVI, es el más importante del budismo en la isla, mientras que el precioso templo Nallur Kandaswamy de Jaffna es uno de los principales lugares sagrados del hinduismo.
12. Copenhague, Dinamarca
Si andas peregrinando solo en busca de una atractiva sirena, tu destino tiene que ser la capital danesa, donde se encuentra la famosa Sirenita de Copenhague.
Estatuas aparte, la ciudad es enormemente amigable con el turista que gusta de conocer los sitios relajadamente, a pie o en bicicleta.
Copenhague cuenta con carriles para ir a todas partes en bicicleta, disponiendo también de acogedores cafés, grandes museos de arte y una interesante vida nocturna, discreta pero intensa.
13. Las islas griegas
No pretendemos que vayas a todas, porque son cerca de 1.400, pero en cualquier isla griega te sentirás en el paraíso terrenal.
La rica comida está garantizada en cualquiera de ellas, con los frescos frutos del mar extraídos por sus pescadores y lo animales y vegetales criados y cultivados por sus granjeros.
Las playas de aguas azul turquesa son un regalo para los sentidos y Grecia, necesitado de euros, es uno de los países más baratos de Europa. ¡Qué más se puede pedir!
14. Terranova, Canadá
En la pequeña ciudad de San Juan, la más poblada de la isla canadiense de Terranova, hay una tradición para iniciar a los turistas con buena suerte, que consiste en besar un bacalao y beber un trago de ron. El beso quizá no te agrade del todo, pero el trago te sentará de maravilla en el clima frío.
Terranova es salvaje, escarpada y está salpicada de remotos asentamientos de pesca tradicionales, que han estado allí durante siglos.
Como toda ciudad portuaria, San Juan de Terranova tiene una vida nocturna muy activa, que siempre es agradecida por las personas que viajan solas.
Después de una noche de copas y diversión, sienta bien ver icebergs, ballenas y aves marinas.
15. Dubrovnik, Croacia
Esta ciudad amurallada y rodeada de fortificaciones en la región dálmata croata, es uno de los principales balnearios en el Mar Adriático.
La llamada Perla del Adriático y la Atenas Dálmata, monopolizó el comercio de la región desde el siglo XV, rivalizando en riqueza con Venecia y en cultura con Florencia.
Durante el verano, las estrechas calles de Dubrovnik están repletas por miles de turistas que bajan de los cruceros, abarrotando sus cafés, restaurantes, tiendas y lugares de interés.
En la bahía encontrarás todos los entretenimientos de playa de tu preferencia y puedes ir a las islas cercanas en los ferrys.
16. Suroeste de EE.UU
El suroeste de Estados Unidos es conocido por sus espectaculares paisajes y aunque hay bosques de pinos y montañas nevadas, los parajes más famosos de la región son sus desiertos profundos de arenisca roja salpicados de cerros de altas y aplanadas cumbres, como mesas.
Una serie de grandes recorridos hacen de este el lugar perfecto para realizar un viaje en solitario. Incluso, puedes protagonizar tu propio western en el Valle de los Monumentos, entre Utah y Arizona, uniéndote a un recorrido a caballo por sus senderos.
Si no puedes hacer de Charlton Heston en La historia más grande jamás contada o de John Wayne en Los comancheros, por lo menos asegúrate de tomar un buen video del impresionante paisaje desde uno de los miradores.
17. La costa este, Australia
Esta ruta es muy transitada por los mochileros que llegan a la ciudad australiana de Cairns, para continuar viaje hacia la Gran Barrera de Coral y el Parque Nacional Daintree.
El arrecife coralino de 2.600 km es el más grande del mundo y una de las principales reservas mundiales en flora y fauna marina.
El Parque Nacional Daintree se encuentra en el sitio aborigen de Piedras Rebotantes, a 100 km al noroeste de Cairns, y es considerado el bosque húmedo más antiguo del planeta, con una antigüedad estimada en más de cien millones de años.
18. Lombok y las Islas Gili, Indonesia
La isla indonesia de Lombok ha venido ganando una excelente reputación entre los turistas independientes que viajan para aprender a hacer surf, snorkel y buceo en hermosas y cristalinas aguas.
Lombok no tiene un turismo tan masivo como su vecina Bali, lo cual es una buena noticia para los que huyen de las grandes aglomeraciones.
Las Islas Gili, situadas a 4 km de la costa norte de Lombok cuentan con playas paradisíacas de arena blanca y aguas azul turquesa.
La isla Gili Trawangan, la más grande de las tres, es la que ofrece mejores posibilidades de diversión a los viajeros solos. Incluso puedes pedir a domicilio una pizza con hongos alucinógenos.
19. Jordania
El reino hachemita es un inusual remanso de paz en medio de los eternos conflictos en el Medio Oriente. La hospitalidad de los jordanos es proverbial y visitar sus hermosas ciudades antiguas es un viaje en una cápsula del tiempo a la era bíblica.
Petra, el sitio arqueológico jordano que fue capital del reino nabateo, es una ciudad esculpida en piedra y uno de los conjuntos arquitectónicos más hermosos de la humanidad.
También en Jordania puedes extasiarte con una noche desértica a orillas del Mar Muerto, con las estrellas flotando sobre el agua.
20. Rajastán, India
Rajastán es un estado de la región noroccidental de la India lleno de fortalezas, palacios y otras espléndidas manifestaciones arquitectónicas de la enigmática nación asiática.
En Kalibanga se encuentra el asentamiento más antiguo de la civilización del Valle del Indo y del subcontinente indio.
El Parque Nacional de Keoladeo, el Parque Nacional de Ranthambore y la Reserva de Sariska albergan santuarios de aves, tigres y otras bellas especies en riesgo de extinción.
Ahora que si prefieres los camellos a los tigres, puedes pasear por el desierto de Rajastán a lomos de uno de estos altos cuadrúpedos; incluso, puedes comprar un ejemplar en la Feria de Camellos de Pushkar, que se celebra anualmente en octubre o noviembre.
Esperamos que muy pronto puedas empacar para ir solo a uno de estos maravillosos destinos. La buena compañía espera allá.
