Viajar al Medio Oriente es una aventura mística, adentrarse en la cultura, conocer templos imperiales, majestuosos paisajes, puede resultar fascinante y a pesar de ser una nación tan pequeña en este continente, Japón tiene muchos atractivos naturales que vale la pena conocer.
1. Cascadas Shiraito
Está situado muy cerca de los cinco lagos y el Monte Fuji, en la Prefectura de Shizuoka y desde 1936 es un Monumento Natural Protegido. El paisaje parece una postal por la combinación de colores que conforman las cascadas y la exuberante vegetación que las rodean.
2. Cinco Lagos Fuji
Pareciera un cuadro pintado a mano por la cantidad de colores y matices que se combinan en este bello paisaje, que durante la primavera se cubre de musgo rosado conocido como shibazakura.
Estos lagos se formaron luego de la erupción del Volcán Fuji y están situados en la base de este monte sagrado.
3. Hanami o Floración de los Cerezos
La contemplación de los cerezos en flor es una auténtica experiencia espiritual de relajación, tanto así que los japoneses hacen un festival conocido como “Hanami” durante los meses de marzo y abril, cuando se combina la belleza de los jardines con la floración natural de estos árboles.
4. Torii Gigante en la Isla Miyajima
Solo se puede acceder en tren y ferry cuando baja la marea y cuando ésta sube, el Torii parece flotar sobre el mar, lo que lo hace un paisaje digno de admirarse, no por nada este sitio es Patrimonio de la Humanidad desde 1996.
5. Bosque de Bambús de Arashiyama
Se trata de uno de los lugares más espirituales del Planeta, tal vez por la conjugación de efectos sensoriales que se producen con la penetración de los rayos del sol y por el suave sonido del viento al balancear las hojas de los frondosos troncos de bambú, que hacen del lugar un espacio místico.
Está situado en la localidad de Kamakura, al noroeste de Kioto, alberga más de 50 variedades de Bambú y la mejor época para visitarlo es durante el otoño cuando las hojas están en su plenitud.
6. Monte Fuji
Este majestuoso vigilante es el símbolo más emblemático de Japón y el paisaje más bello que ofrece se puede apreciar desde la pagoda Chureito, del Parque Arakurayama Sengen.
El Monte Fuji es el pico más alto del País y en días que no hay mucha neblina, se puede apreciar desde Tokyo.
7. Pabellón Dorado o Kinkaku Ji
Se trata de un Templo Zen cuyo paisaje se asemeja al de una postal, ya que se refleja en el estanque llamado Espejo de Agua, y forma parte del conjunto de monumentos históricos de Kioto.
Fue construido en 1387 y las paredes exteriores de las dos plantas están recubiertas de pan de oro; en 1994 fue declarado Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO.
8. Paisaje de Kamikoshi
Es un valle situado en las tierras altas y está rodeado por picos de gran altura, conocido también como los Alpes Japoneses. Si te gusta practicar el senderismo o las caminatas al aire libre, los paisajes de este lugar te fascinarán.
9. Kumano Kodo
Es un camino milenario que une tres santuarios sintoístas formado por senderos montañosos de belleza espectacular. A pesar de ser una ruta de peregrinaje muy antigua, aún se conserva. Caminar por aquí es una experiencia espiritual y única para quienes aman la naturaleza.
10. Paisajes de Nara
En Nara podrás apreciar los más bellos paisajes de Japón, pues es un lugar que aún conserva el espíritu del Japón tradicional en sus calles, su arquitectura y sus elementos naturales. Es una visita imperdible en tu viaje a esta Ciudad del Sol Naciente.
11. Monte Asai
Es un destino muy visitado por los turistas, en el verano por sus paisajes y en el invierno por sus caminos nevados, ya que es muy fácil de escalar y no es necesario contar con equipo o habilidad en especial. Se levanta a 2,290 metros y es el pico más alto de la Isla de Hokkaido.
12. Shibu Onsen
Las aguas termales – Onsen- fueron arropadas por los japoneses desde la antigüedad, cuando no se tenía noción de los tratamientos medicinales, y se utilizaban para curar lesiones o tratar enfermedades.
Hoy en día forman parte de la cultura japonesa y se han convertido en sitios de entretenimiento y relajación; el Onsen más famoso es el de Shibu, que se encuentra en la ciudad de Nagano; y es el único donde se puede apreciar a los monos salvajes disfrutando de baños termales.
13. Islas Kerama
Es un conjunto de 22 islas situadas a 32 kilómetros al suroeste de la isla de Okinawa, solamente 4 de ellas están habitadas, lo que las hace un atractivo hábitat de numerosas especies marinas, como la ballena jorobada que puede se apreciada durante el invierno.
Estas islas atraen visitantes de todo el mundo que practican el buceo.
14. Cascadas de Nashi
Un majestuoso Templo Budista ha custodiado por años a esta interminable caída de agua, tras la que reposa un imponente muro de rocas.
Mide 133 metros de altura y es la cascada más alta del País, se sitúa en la prefectura de Wakayana, en la Isla Honshü y también forma parte del acervo japonés de sitios que son Patrimonio de la Humanidad.
15. Yakushima
Está situada en Kyushu, cerca de la ciudad de Kagoshima y entre otros atractivos, vale la pena visitarla por la cantidad de onsen -aguas termales- que alberga.
Estos son solo algunos de los paisajes que vale la pena conocer en el País del Sol Naciente, cuyos habitantes tan respetuosos de su entorno, que han sabido mantener su belleza para beneplácito de los viajeros y de quienes buscan experiencias que solo la naturaleza puede brindar.
Haznos saber en los comentarios cuál de éstos sitios te gustaría visitar pronto.
